como una aguja poco afilada, que le cuesta penetrarme,
pero que hace que la sangre me empape
como un río que transporta rocas de memorias
y me deja desarmada y desnuda,
helada con la nieve de un invierno reencontrado.
El temor ha penetrado el corazón
y se me ha roto.
Y no he podido recomponer los pedazos
con su sabor a vino añejo.
Mi corazón se ha envenenado
por esos recuerdos que no existieron.
Mi corazón se ha destrozado.
Mi corazón no existe.
17.10.2013
C.Merino
Me encanta *-*
ResponderEliminar"Como un río que transporta rocas de memorias" me ha gustado eso!
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